Spaemann: también con catorce años se tiene conciencia

Spaemann, Robert. 2014. Sobre Dios y el Mundo. Una autobiografía dialogada, Biblioteca Palabra, cap. I.
«Un día regresaba a casa desde la escuela. Era durante el período en que los judíos tenían que llevar una estrella. Aún les estaba permitido utilizar los medios públicos de transporte. Un señor anciano y respetable, que llevaba la estrella judía, tomó asiento en el tranvía. En la siguiente estación subió un joven que, al ver al anciano, en tono grosero le increpó para que se levantara, pues, como judío que era, no podía ocupar uno de esos asientos. El anciano señor se levantó sin decir palabra y el arrogante joven ocupó su puesto. En ese instante me convencí –entonces tenía catorce años– de que solo podía haber una forma correcta de conducta: levantarme y ofrecerle mi asiento a ese señor. No lo hice. Continué sentado. Tenía miedo. Hasta el día de hoy me avergüenzo de aquello. En aquel momento se apoderó de mí una furia tremenda contra quienes habían conseguido llevarme a permanecer sentado de forma tan indigna, contra quienes me habían inducido a capitular ante la cobardía. También con catorce años se tiene conciencia. Poco después desapareció la gente con las estrellas de David. Fueron deportados al Este. Se rumoreaba que allí se les emplearía como mano de obra para la industria bélica. La gente que no llevaba la estrella creía fácilmente ese rumor. Entre la mayor parte de la población no había nada parecido al odio antisemita. El régimen sabía bien que en Alemania a la gente no se la podía confrontar con la verdad desnuda del asesinato en masa de los judíos. La gente simplemente no quería saber nada de eso».

Acerca de Martin Montoya

I am Professor of "Ethics", "Philosophical Anthropology", and "History of Contemporary Philosophy" at the University of Navarra, researching on practical philosophy.
Esta entrada fue publicada en identidad, Pensando en..., Política, sociedad, verdad y etiquetada , , . Guarda el enlace permanente.