La libertad humana en sentido ontológico

Palacios, Juan Miguel. 2013. La condición de lo humano, Encuentro: 12-15.

La libertad del hombre en sentido ontológico es la indeterminación o inconcreción del ser del hombre a una determinada manera de ser, o, lo que es lo mismo, es la apertura del ser del hombre a muchas posibles maneras de ser.

Esta inconcreción, esta apertura del ser del hombre no es una apertura física, como la de una puerta, sino metafísica, y consiste en la admirable capacidad que este tiene de, sin dejar de ser lo que es, poder al mismo tiempo ser de alguna manera todos los demás seres.

Lo que hace posible esta apertura del hombre a esa inmensa multiplicidad es su conciencia. Por su conciencia el hombre es, como dice Aristóteles, «de alguna manera todas las cosas» (ἡ ψυχὴ τὰ ὄντα πώς ἐστι πάντα) [De Anima III, 8, 431 b 21]. Es, pues, su conciencia lo que convierte al hombre en un ser en cierto modo ilimitado: «Las fronteras del alma no las hallarás andando por cualquier camino que recorras -escribía ya Heráclito (Cf. Diels/Kranz, Die Fragmente der Vorsokratiker, 22 B 45). Tan profundo es su logos».

La conciencia abre al hombre a la multiplicidad de lo real, e incluso de lo irreal, cuando este ejerce sus dos grandes posibilidades psíquicas: la de conocer las cosas y la de tender a ellas.

En el conocimiento, el hombre, frente a todos los demás animales, cuyo conocimiento no parece ir más allá del mero mundo sensible -el mundo de los cuerpos y el de los hechos de conciencia-, recortado además por los umbrales de sus respectivas facultades psíquicas, trasciende las evidentes limitaciones de su capacidad animal y se abre a otros géneros de realidad y hasta de irrealidad, que convierte en objetos y que son tan dispares como los números negativos, los yoes ajenos reales o inventados de los personajes literarios, los valores, el mundo histórico o las personas divinas.

Y otro tanto le ocurre cuando tiende. Los demás animales, en su comportamiento tendencial, tienden siempre a un muy reducido repertorio de objetos, recortado entre todos los objetos que constituyen el mundo; cada una de las especies animales tiene, por así decirlo, su mundo, que ciertos biólogos de principios del siglo pasado dieron en llamar su mundo circundante (Umwelt): tienen, primero, el mundo que advierten (su Merkwelt) y, luego, sólo una parte o provincia de éste, que es el mundo sobre el que reobran, el mundo al que tienden (su Wirkwelt), su ámbito de acción. En su comportamiento conativo los demás animales son, por así decirlo, muy provincianos. En cambio el hombre, en su comportamiento tendencial, se muestra realmente muy cosmopolita y amplio, enviando sus deseos y voliciones a los objetos más dispares y hasta disparatados: se muestra como un ser capaz de querer no ser, como un ser racional capaz de querer no pensar y hasta de querer lo imposible: capaz de querer la luna, como le vemos decir al emperador Calígula en el conocido drama de Albert Camus como un ser que hasta pretende llegar a unirse con Dios. Por eso filósofos como Herder, en el siglo XVIII, o, en el pasado siglo, Max Scheler, o antropólogos como Arnold Gehlen han podido afirmar que frente a los demás seres animales, el hombre no tiene propiamente Umwelt, mundo circundante, sino que tiene Welt, lo que tiene es mundo, y han defendido al hombre como espíritu por su apertura al mundo.

(…)

Es precisamente esta peculiar libertad del ser del hombre, que se muestra abierto, por su específica conciencia racional, al conocimiento y a la apetición de lo más diverso, a la que en Alemania un discípulo de Heiddeger -Max Müller- y en España nuestro filósofo Antonio Millán -Puelles dieron en llamar la «libertad trascendental» del hombre. Una singularísima amplitud de su naturaleza que le permite, en principio, participar, por su conciencia cognoscitiva y tendencial, de todo lo que es y hasta de lo que no es: de todo lo que pueda ocurrírsele.

Avatar de Desconocido

About Martin Montoya

I am Professor of Ethics, Philosophical Anthropology, and History of Contemporary Philosophy at the University of Navarra, researching on practical philosophy.
Esta entrada fue publicada en Acción, Antropología, Free Will, libertad, Metafísica, Pensando en... y etiquetada , , , , , , , , . Guarda el enlace permanente.